Orgullo Girasolero: el grupo de padres del Depo equipa con ropa de viaje a todos los jugadores de las formativas
- Winifreda
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En el Club Social y Deportivo Winifreda, hay victorias que no se celebran con goles ni trofeos, sino con gestos silenciosos, perseverantes y llenos de amor. El Grupo de Padres de las Categorías de Inferiores del club volvió a demostrar que el compromiso, la organización y la solidaridad también construyen identidad deportiva.

Durante los últimos días, informaron con alegría que han logrado adquirir toda la indumentaria de viaje para todos los jugadores que integran las divisiones formativas del “Depo”, gracias a un esfuerzo colectivo sostenido en el tiempo y completamente desinteresado.
¡Nueva indumentaria para todos!
La nueva ropa incluye pantalones largos, buzos, remeras y camperas rompeviento. Las prendas ya comenzaron a ser entregadas a los jugadores de cuarta y quinta división, y durante esta semana se completará el conjunto con los pantalones que llegarán desde la fábrica textil.
Uno de los padres que forma parte del grupo organizador expresó:
"Está llegando la nueva ropa de viaje... ya se las entregamos, nos están faltando los pantalones, pero en esta semana nos los entregan desde la fábrica. Así que prontito ya los chicos de inferiores van a tener todo. Aprovechamos para agradecer a la gente que siempre colabora con nosotros. Para nosotros es un orgullo que nuestros chicos, todos, sin tener que pagarla, tengan su ropa."
Más que ropa: contención, compromiso y comunidad
Este logro no es aislado. Se enmarca dentro de una tarea diaria y constante que este grupo de padres realiza con dedicación: preparar los viajes, organizar desayunos y almuerzos, brindar apoyo emocional, y cubrir todas las necesidades que pueda tener un niño o adolescente dentro de un club.
En muchos casos, estos padres dejan de lado su propio trabajo, tiempo libre y recursos personales para acompañar el crecimiento de cada pibe que representa al Deportivo Winifreda. Un ejemplo de solidaridad barrial, comunitaria y deportiva que merece ser visibilizado y aplaudido.
¡Gracias por tanto!
Lo que está haciendo este grupo de madres y padres es mucho más que vestir jugadores: están construyendo sentido de pertenencia, sembrando valores, y asegurándose de que cada chico pueda disfrutar del fútbol sin que lo económico sea un obstáculo.
Desde la institución, y desde cada rincón del pueblo, el agradecimiento y la admiración son inmensos. Porque cuando hay amor, unión y compromiso, los verdaderos campeones están fuera de la cancha... acompañando en silencio.