En la zona rural de Conhello cayeron poco más de 300 milímetros en los últimos 10 días, y quedaron algunos caminos intransitables por la acumulación de agua.
El sábado hubo una fuerte tormenta de agua y algo de granizo, que causó algunos perjuicios en los campos en la zona norte del ejido conhellense.
El cabañero Hernán Buffa relató aún sorprendido que la semana pasada «traíamos un acumulado de 120 milímetros, y el sábado a la tarde cayeron 120 milímetros de golpe, esa noche otros 100 y el domingo otros 20».
«La cantidad varía levemente de un lote a otro, pero son más de 300 milímetros en esta época del año es algo totalmente inusual», destacó el titular de la cabaña El Yerua.
El propietario del campo San Juan detalló que las últimas lluvias caídas en pocas horas «hacen imposible hoy utilizar el camino de acceso al campo, pero en dos o tres días con viento y sol, nuestros suelos areneros absorben esas precipitaciones». «No me atrevo en La Pampa a quejarme del agua», destacó -risueño- Buffa.
El ingeniero agrónomo evaluó que «el clima nos sorprende» porque «es un otoño atípico por las precipitaciones y las temperaturas, así que esperamos que nos acompañe para que los cultivos que se retrasaron por un verano seco, se compensen con un otoño sin heladas», dijo. «El sábado estábamos revisando unos lotes y percibíamos alta humedad y alta temperatura, que no es normal en esta época», agregó.
La caudalosa lluvia llegó acompañada por algo de granizo, que provocó algunos daños en los cultivos. «A nosotros nos agarrá la colita de granizo donde nos causó algunos daños en los maíces y los sorgos, pero por la fecha y el estado fisiológico no fueron de magnitud. Tengo entendido que más hacia el norte ya la pedradada fue más significativa, porque me pasaron videos con granizo del tamaño de una pelota de ping pong», concluyó. fuente diario La Arena
