El Gobierno del Presidente Javier Milei ha decidido posponer por un mes la actualización del impuesto a los combustibles con el objetivo de moderar el impacto en el bolsillo de los ciudadanos ante los aumentos en los precios de los carburantes. A pesar de esta medida, las empresas del sector han implementado un aumento del 4% en los valores, justificado por la devaluación mensual del peso frente al dólar y el incremento del barril de petróleo.

Este incremento del 4% ya está en vigencia desde este miércoles, lo que ha llevado a que el precio del litro de gasoil en la provincia de La Pampa supere los 1000 pesos. La intención inicial del gobierno nacional era evitar aumentos significativos en el precio en surtidor durante el mes de mayo, sin embargo, las empresas han aplicado esta suba, la mitad de la cual se atribuye a la compensación por la devaluación del peso y la otra mitad a la recomposición de precios por la inflación.
Con esta actualización, en las estaciones de servicio de YPF, la Nafta Súper ha pasado de 747 a 777 pesos por litro, mientras que la Infinia ha subido de 947 a 985 pesos. En cuanto al gasoil, el Diésel 500 ha superado el umbral de los 1000 pesos, alcanzando un precio de $1007 por litro, y la Infinia Diésel ha llegado a los $1230 por litro.
Este aumento en los precios de los combustibles representa un desafío adicional para los consumidores, que ya enfrentan dificultades económicas debido al contexto inflacionario y la devaluación de la moneda. La situación plantea la necesidad de adoptar medidas que mitiguen el impacto en el bolsillo de la población, al tiempo que se garantiza el funcionamiento adecuado del sector energético.