DE REMATE EN REMATE
La plaza de invernada tuvo un comportamiento sostenido en base a una oferta reducida por los feriados. Las diferencias se dirimieron por calidad y plazos. La exportación sostenida.
La venta de haciendas de invernada volvió a encontrar a una demanda interesada que en base al aumento del gordo en Liniers hizo a la reposición más equitativa. Sabido es que los valores actuales distan aún de los máximos alcanzados el año pasado aunque las circunstancias que hoy se presentan son distintas a las anteriores.
De las inundaciones y la falta de campo que expresaban muchos invernadores en la primera mitad del año pasado, se pasó ahora a una sequía e incendios que acosa a todos los sectores ganaderos, ya sea a la cría como a la invernada.
Quizás por esta circunstancia el mercado de la reposición va rehaciéndose en sus precios lentamente pues si bien sube el consumo y la exportación se mantiene con buenos valores, hay por lo apuntado con anterioridad – seca e incendios- una oferta más importante que la demanda va absorbiendo en buena forma aunque limitando en parte su competitividad.
Bajo la situación actual de falta de precipitaciones adecuadas para la época, se fueron valorizando en particular las haciendas livianas y muy livianas, tanto en machos como en hembras. En particular y en esta semana que concluyó, la oferta de vacas en todas sus categorías fue muy pobre y no alcanzó para visualizar una tendencia respecto al resto de lo puesto a la venta.
En tanto, el próximo período estará signado por el paro de camioneros y mientras en nuestra provincia no dificultará la realización de los remates ferias, sí puede tener una mayor repercusión en los carguíos a Liniers y a los frigoríficos en cuanto a la venta directa se refiere. La oferta de haciendas de invernada en La Pampa se concentrará en éste período en General Acha con dos remates que en la previa suman casi 6.000 cabezas, en muchos casos provenientes de campos siniestrados.
En Liniers.
La reducción de la oferta y las pocas compras directas que pudieron efectuarse por parte de matarifes y frigoríficos con anterioridad a los últimos feriados, llevaron a la demanda a actuar firmemente en Liniers para dar un salto de importancia a las cotizaciones.
De tal forma todas las categorías y clasificaciones expresaron mejoras que fueron en promedio de 1,20 a 1,50 pesos por kilogramo en pié. La entrada de la semana fue de 20.702 vacunos (anterior 24.920) con un aporte de 1.441 cabezas (anterior 1.645) remitidas desde nuestra provincia. El índice semanal sugerido para los arrendamientos rurales fue fijado en 33,364 pesos versus los 32,151 pesos del ciclo hebdomadario anterior.
Por su parte el promedio del novillo liviano de 431 a 460 kilos fue de 34,453 pesos (anterior $ 33,157) y el del novillito pesado de 391 430 kilos de 36,643 pesos contra los 35,073 pesos del ciclo pasado.
Exportación.
Los negocios con novillos de exportación se realizaron con plaza sostenida y en algunos casos con leves mejoras. En nuestra provincia y por novillos hasta 150 kilos la media res se ofrecían, al cierre de las operaciones, 62 pesos; hasta 160 kilos 61,50 y hasta 170 kilos 61 pesos, con cierto grado de flexibilización en los kilajes y/o precios por cantidad, calidad y uniformidad de los lotes.
Sobre empresas exportadoras de Buenos Aires lo más común fue escuchar valores de 62,50 a 63 pesos por novillos de hasta 500/520 kilos en pié o hasta 150 kilos la media res. Con pagos de 7 a 30 días. Algunas empresas por necesidades puntuales pagaron por los mismos novillos 64 pesos con 30 días al igual que lo que sucedía en el período anterior.
Por vacas con certificado para exportar y sobre Buenos Aires los valores se ubicaron entre 52,00 y 52,50 pesos.
