Los 120 milímetros caídos en los últimos días en Winifreda inundaron unas 20 hectáreas de soja en el establecimiento "Don Gerónimo", propiedad de Abelino Alles, ubicado dentro radio urbano. Esa gran masa de agua, además, anegó dos galpones de grandes dimensiones, los corrales donde se encuentran unos 110 vacunos y estuvo a un metro de ingresar a la vivienda de un familiar directo del dueño del campo.
Sus hijos Mariano y Maximiliano Alles, comentaron que es la primera vez que se produce esta situación en el predio rural, donde años anteriores han caído lluvias superiores a los 200 milímetros y no hubo problemas. El aguacero del martes a la madrugada arrojó menos cantidad de agua y el suelo no la absorbió. Unas 20 hectáreas de soja, plantadas con el método de siembra directa, literalmente quedaron inundadas. Alcanzaron a poner en resguardo casillas, sembradoras y carros.
La intendenta Adriana García (PJ) tomó conocimiento de lo sucedido y con autorización de los chacareros gestionó ante la Administración Provincial del Agua (APA) una bomba extractora. Los capataces municipales fueron a buscarla a Santa Rosa, la armaron y la instalaron en una parcela. La máquina funciona desde el miércoles de 14 a 21 o a partir de las 16,30 y extrae aproximadamente 400 mil litros de agua por hora y la deposita en un canal que corre en forma paralela al campo y las vías del ferrocarril.
El viernes a la tarde, los hermanos Alles intentaron darle de comer a los animales que permanecen en medio del agua, pero tienen acceso a un comedero. Se acercaron en dos tractores y uno de ellos quedó encajado.
Cuando puedan van a trasladar los bovinos a otro campo. La inundación no les provocó daños materiales, sólo la pérdida del cultivo y son conscientes que no van a recuperar la inversión. > Luis Barbaschi para LA ARENA 03/01/2016 <
