Dario Lobos7 ago 20221 Min. de lecturaTarde de domingo (relato)Domingo, tarde de llovizna y de nostalgia,Así y todo me propuse desafiarla,Sin piloto ni paraguasSalí a recorrer mi barrio.Me puse unas viejas zapatillas,Y el viento fresco arropó mi cuerpoY los recuerdos cobijaron mi corazón.Cruce Gaona rumbo a Artigas,Me crucé con Roberto mi vecinoQue como un artistaSostenía el cigarro entre sus labiosSin siquiera estar mojadoLe hacía techo con su mano.Después pasé por el puesto de revistasY Quique el diarieroTapando con bolsitas su sustentoLo noté como nunca muy enojado,Con este "Feibu"Y la tecnologíaYa la venta ha caído demasiadoFue esa su única expresión.El perro callejero mojado de oreja a rabo,La llovizna ya más fuerte no frenabaSu lucha por sacar de la basuraLo que sea arroz, fideos o zapalloY si era su día de suerte un caracúEso ya sería un gran regalo. Baldosas y veredas hecha añicos,Mis pies se mojaron y mojaronY descalzo por la rota acera,A paso lento continúe andando.El bar estaba abierto,Ví sentada a mi vecina del octavoPero no era su maridoA quien tomaba de la mano,Al verme lo soltó apresurada,Bueno es cosa que mi nada importaba.De pronto en la quietud y silencio de la tarde,Bocinazos por Gaona y gritos desde los edificios y balcones,Gol de Boca sobre la horaPara ganarle a mi River del alma.Sí, la llovizna me trajo la nostalgia De tantos domingos en La Pampa,Este andar y andar a la derivaPara aclarar mi cabeza ya con canas,Me hizo sentir otro domingoTan gris como el día que se apaga.Ya era lluvia y mis pies muy empapados, De pronto como alarma un estornudoMe hizo regresar sobre mis pasos.D L 7 de agosto 2022.
Domingo, tarde de llovizna y de nostalgia,Así y todo me propuse desafiarla,Sin piloto ni paraguasSalí a recorrer mi barrio.Me puse unas viejas zapatillas,Y el viento fresco arropó mi cuerpoY los recuerdos cobijaron mi corazón.Cruce Gaona rumbo a Artigas,Me crucé con Roberto mi vecinoQue como un artistaSostenía el cigarro entre sus labiosSin siquiera estar mojadoLe hacía techo con su mano.Después pasé por el puesto de revistasY Quique el diarieroTapando con bolsitas su sustentoLo noté como nunca muy enojado,Con este "Feibu"Y la tecnologíaYa la venta ha caído demasiadoFue esa su única expresión.El perro callejero mojado de oreja a rabo,La llovizna ya más fuerte no frenabaSu lucha por sacar de la basuraLo que sea arroz, fideos o zapalloY si era su día de suerte un caracúEso ya sería un gran regalo. Baldosas y veredas hecha añicos,Mis pies se mojaron y mojaronY descalzo por la rota acera,A paso lento continúe andando.El bar estaba abierto,Ví sentada a mi vecina del octavoPero no era su maridoA quien tomaba de la mano,Al verme lo soltó apresurada,Bueno es cosa que mi nada importaba.De pronto en la quietud y silencio de la tarde,Bocinazos por Gaona y gritos desde los edificios y balcones,Gol de Boca sobre la horaPara ganarle a mi River del alma.Sí, la llovizna me trajo la nostalgia De tantos domingos en La Pampa,Este andar y andar a la derivaPara aclarar mi cabeza ya con canas,Me hizo sentir otro domingoTan gris como el día que se apaga.Ya era lluvia y mis pies muy empapados, De pronto como alarma un estornudoMe hizo regresar sobre mis pasos.D L 7 de agosto 2022.