Espert presentó en Casa Rosada el proyecto de “Inocencia Fiscal”: “Ya no se perseguirá a los que tienen dólares en el colchón como si fueran Al Capone”

El presidente de la Comisión de Presupuesto, José Luis Espert, y el titular de ARCA, Juan Pazo, anunciaron una profunda reforma impositiva que promete cambiar el vínculo entre el Estado y los contribuyentes.

En una conferencia inesperada desde la Casa Rosada, el diputado nacional José Luis Espert sorprendió al país al presentar el proyecto de ley denominado “Principio de Inocencia Fiscal”, una iniciativa que, según sus impulsores, busca “terminar con el sistema persecutorio y asfixiante que ha imperado durante años” en la política tributaria argentina.

“Ya no se perseguirá a quienes tienen dólares en el colchón como si fueran Al Capone”, aseguró Espert, en una declaración cargada de críticas al enfoque tradicional de control fiscal. La iniciativa, impulsada desde la Agencia Federal de Ingresos Públicos (ARCA), marca un cambio de paradigma en materia impositiva, con el objetivo de generar mayor previsibilidad, equidad y libertad fiscal para los ciudadanos.

Dos esquemas claves: reforma general y régimen simplificado

Durante la presentación, Juan Pazo, titular de ARCA, explicó que el proyecto contempla dos grandes esquemas. El primero se orienta a reformar el régimen general de fiscalización, elevando los umbrales que hoy habilitan investigaciones por evasión.

“Hasta hoy, en Argentina podían investigarte como evasor por una diferencia de apenas 1,5 millones de pesos. Algo ridículo”, criticó Pazo, quien confirmó que ese umbral será modificado de forma significativa.

Además, el plazo de prescripción para que ARCA inicie una determinación tributaria se reducirá de cinco a tres años, siempre que el contribuyente haya presentado sus declaraciones juradas en tiempo y forma.

“Quien incumpla y sea notificado, podrá resolverlo pagando lo que debe. Esta ley busca resolver los problemas impositivos pagando, no persiguiendo”, enfatizó Pazo.

El segundo esquema se refiere al nuevo régimen simplificado del Impuesto a las Ganancias, que, de aprobarse, blindará jurídicamente a quienes se adhieran. El objetivo es que los ciudadanos regularicen su situación patrimonial con un criterio claro: pagarán solo por lo que hayan facturado, sin que se les cuestione por su nivel de consumo o variación patrimonial.

“Si una persona compra cinco departamentos, ARCA solo le cobrará Ganancias por lo que haya facturado, menos los consumos deducibles”, ejemplificó el funcionario.

Apoyo y advertencias a las provincias

Pazo agradeció públicamente a las 14 provincias que ya firmaron su adhesión al nuevo régimen, y anticipó que dos más lo harán en los próximos días. En cambio, Espert lanzó un fuerte mensaje a las jurisdicciones que aún no lo han hecho.

“Queda en sus manos devolverle la libertad a los ciudadanos de sus provincias o si quieren persistir con este sistema perverso que tanto daño le ha causado al país”, lanzó el legislador liberal, al tiempo que mencionó a las provincias “soviéticas” que aún no adhirieron: Buenos Aires, La Pampa, Formosa, Tierra del Fuego, La Rioja, Santa Cruz, Santiago del Estero y Santa Fe.

Un nuevo contrato fiscal

El mensaje fue claro: este proyecto busca construir un nuevo contrato entre el Estado y el ciudadano, dejando atrás décadas de hostigamiento impositivo.

“La gente que adhiera, pagará y se despreocupara. Ningún otro gobierno podrá volver a perseguirlos. Se termina la adicción estatal a tratar como delincuentes a los argentinos de bien”, concluyó Pazo.

De avanzar en el Congreso, el proyecto podría representar una transformación histórica en el sistema tributario argentino, y un cambio de mentalidad profunda en la relación entre el Estado y quienes generan riqueza.

Fuente NA