Una tragedia sacudió a la tranquila localidad de Blaquier, ubicada en el partido de Florentino Ameghino, provincia de Buenos Aires, cuando un hombre se descompensó mientras realizaba tareas de mantenimiento en un pozo de cloacas y cayó a una profundidad de 12 metros. Cinco valientes vecinos se lanzaron a rescatarlo, pero lamentablemente todos perdieron la vida en el intento.
El fatal incidente tuvo lugar en un lugar conocido como "el cigarro", donde Ricardo Bottega, un respetado bombista de 60 años, había sido contratado para llevar a cabo labores de mantenimiento en el pozo. Según los informes locales, la descompensación de Bottega fue causada por la inhalación de gas butano, un peligroso gas que se desprende del líquido presente en el pozo.
El municipio de Florentino Ameghino, a cargo de las cloacas, fue alertado de la situación por Ezequiel Rodríguez, el responsable de la instalación, quien solicitó ayuda de manera urgente. Como acto de valentía y solidaridad, varios vecinos se acercaron para colaborar en el rescate, pero el trágico desenlace dejó a la comunidad en estado de shock y dolor.
Además de Ricardo Bottega, perdieron la vida en este fatídico suceso Carlos Reinger, bombero voluntario de 39 años; Alejandro Centeno, de 36 años; Mateo Pellegrino, bombero voluntario de 27 años; Juan Ramón Sanchez, de 50 años; y Nicolás Sánchez, bombero voluntario de 28 años.
Mateo Pellegrino, el bombero voluntario más joven y una promesa reciente de la comunidad, tenía tan solo 27 años y había obtenido su título de licenciado en Ciencias Veterinarias el año pasado en la Facultad con sede en General Pico de la Universidad Nacional de La Pampa. Apasionado por el fútbol y ferviente seguidor de Independiente, deja un vacío irremplazable en su círculo cercano y en la comunidad en general.
La tragedia en Blaquier deja un profundo dolor y una sensación de consternación en toda la región, recordándonos la importancia de la seguridad en el trabajo y la solidaridad comunitaria en momentos de crisis.
