La empresa Durlock, con planta instalada en General Acha, despidió este viernes a cinco trabajadores, sumando tensión al ambiente laboral. La notificación se les comunicó a los empleados después del mediodía, al finalizar su turno, generando incertidumbre entre aquellos que terminaban su jornada laboral en horas de la noche.
Estos despidos se agregan a los 12 realizados por la empresa a finales de junio, como consecuencia de la crisis de productividad que afecta a la industria y, en particular, al sector de la construcción. Todos los trabajadores despedidos pertenecen al sector de Producción, siendo los primeros 12 de la sección de «productos especiales».
Los operarios despedidos en la primera tanda llegaron a un acuerdo con la empresa, recibiendo un 30% adicional en su indemnización y con la promesa de reincorporación en caso de reactivación de las ventas. Sin embargo, con el aumento de la cantidad de cesanteados, el panorama es cada vez más incierto.
El sector de «productos especiales» se encarga de la producción de masilla y la fabricación de placas de cielorraso, contando con un total de 35 empleados antes de los despidos. Hasta este viernes, la planta de Durlock operaba con 149 empleados en producción, además de unos 40 pertenecientes al personal jerárquico.
El pasado 13 de marzo, la empresa había anticipado la posibilidad de suspensiones de personal debido a la caída en las ventas provocada por la situación económica actual. "Las ventas han caído significativamente y en los últimos dos meses la producción se ha detenido debido al exceso de stock en los depósitos", indicaron en su momento fuentes de la seccional de la Asociación Obrera Minera Argentina (AOMA) Río Negro y La Pampa.
Durante las últimas semanas, la empresa aprovechó la paralización de la producción para realizar mantenimiento mecánico y limpieza. Sin embargo, desde el gremio advirtieron que, si no mejoran las ventas, podrían implementarse suspensiones de personal, según lo manifestado por los directivos de la empresa.
"Las medidas del gobierno han afectado considerablemente el bolsillo de la gente y la paralización de las obras de construcción es un tema de público conocimiento", afirmaron desde el gremio.
La situación en la planta de Durlock refleja la compleja situación que atraviesa la industria a nivel nacional y la necesidad de medidas que impulsen la reactivación económica para evitar más despidos y suspensiones en el futuro.
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