El Congreso ha dado un paso significativo al aprobar una serie de modificaciones clave en la Ley de Alquileres.
A continuación, destacamos los cambios más importantes que marcarán un impacto en el sector de arrendamientos:
Duración del Contrato: Se mantiene la duración de los contratos en tres años, brindando estabilidad tanto a inquilinos como a propietarios.
Actualizaciones Semestrales: Uno de los cambios más notables es que las actualizaciones de los precios ahora se permitirán dos veces al año, en intervalos mínimos de seis meses. Esto supone un cambio significativo en comparación con la normativa anterior, que permitía solo una actualización por año del valor del alquiler.
Índice de Actualización: La nueva ley establece el uso del coeficiente de "Casa Propia" como índice para la actualización de precios, tal como lo utiliza el Ministerio de Desarrollo Territorial y Hábitat. Este índice se compone de la menor variación entre el promedio del 0,9% de la variación del Coeficiente de Variación Salarial publicado por el INDEC y la variación del Coeficiente de Estabilización de Referencia publicado por el Banco Central de la República Argentina.
Moneda Nacional: La normativa enfatiza que el precio de los contratos debe establecerse en moneda nacional, y prohíbe la expresión del precio de las locaciones de inmuebles en otra moneda que no sea el peso.
Beneficios Fiscales: Se introduce un incentivo fiscal relacionado con el monotributo, eximiendo del pago del monotributo a los ingresos provenientes exclusivamente de la locación de hasta dos inmuebles.
Exenciones Fiscales: Se mantienen las exenciones de Bienes Personales para los inmuebles destinados al alquiler de viviendas habitacionales y la exención del impuesto al cheque para las cajas de ahorro o cuentas corrientes utilizadas exclusivamente para operaciones relacionadas con la actividad de alquiler de inmuebles destinados a viviendas habitacionales, siempre que los contratos estén debidamente registrados.
Deducción en el Impuesto a las Ganancias: Un beneficio adicional es que las partes involucradas podrán deducir del impuesto a las Ganancias un 10% del monto anual del contrato de locación, lo que aliviará la carga fiscal para inquilinos y propietarios.
Estos cambios representan un paso importante hacia una regulación más equitativa y eficiente en el mercado de alquileres, brindando mayor claridad y estabilidad a todas las partes involucradas. La nueva ley busca promover un entorno más justo y favorable para inquilinos y propietarios por igual.
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