El costo de vida muestra señales de desaceleración. Según el último informe del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), el Índice de Precios al Consumidor (IPC) experimentó en noviembre un aumento del 2,4%, marcando una tendencia alentadora tras varios meses de alta inflación.
![](https://static.wixstatic.com/media/4e4f43_f5d5460cf25f4d54bf77cfbc282f5f46~mv2.jpg/v1/fill/w_980,h_653,al_c,q_85,usm_0.66_1.00_0.01,enc_auto/4e4f43_f5d5460cf25f4d54bf77cfbc282f5f46~mv2.jpg)
Detalles de la inflación
Variación interanual: La inflación se ubicó en un 166% en comparación con noviembre del año pasado.
Acumulado anual: Durante 2024, la suba acumulada alcanzó el 112%.
Categorías destacadas
Entre los rubros relevados:
Alimentos y bebidas: Fue una de las categorías con menor incremento, con un alza mensual de apenas 0,9%, lo que podría significar un alivio para los consumidores.
Educación: Lideró los aumentos con un notable 5,1%, reflejando un ajuste significativo en este sector.
Una señal de estabilidad económica
Este comportamiento del IPC sugiere una moderación en el ritmo inflacionario, aunque los valores interanuales aún muestran niveles elevados. Los analistas estarán atentos a los próximos meses para evaluar si esta tendencia a la baja se consolida.
La desaceleración en el rubro de alimentos y bebidas, clave para el bolsillo de las familias, es un dato positivo dentro del complejo panorama económico actual.