General Pico se convirtió nuevamente en escenario de un caso estremecedor de estafa bajo la modalidad del "cuento del tío". En esta ocasión, la víctima fue una mujer de 72 años, quien cayó en una trama engañosa que incluyó la simulación del secuestro de su hija, desencadenando una serie de eventos que evidencian la sofisticación y frialdad con la que operan los delincuentes.
El fiscal Matías Juan, en diálogo con INFOPICO, describió este episodio como particularmente grave, ya que, al tratarse de una extorsión, las penas son más severas que las de una estafa común. Según el fiscal, "las estafas y extorsiones con esta modalidad siguen en aumento", poniendo en alerta tanto a las autoridades como a la comunidad.
Un secuestro falso que aterrorizó a una familia
Todo comenzó en la madrugada, mientras la mujer se encontraba sola en su hogar. Una llamada telefónica, cuidadosamente orquestada, simuló la voz de su hija en una situación desesperada. "Gritaba y decía que la tenían secuestrada y que la iban a matar", detalló el fiscal. Acto seguido, un supuesto secuestrador tomó el control de la conversación, exigiendo que entregara "todo el dinero, joyas y bienes de valor" como condición para liberar a su hija.
Aterrorizada y sin tiempo para verificar la veracidad de la llamada, la víctima siguió las instrucciones. Preparó una bolsa con 5.800 dólares y un anillo de oro, y en medio de la lluvia, salió a dejarla en un punto específico de la Ruta 102, cerca de una aceitera. Minutos después, los estafadores recogieron el botín y cerraron el macabro acto con una llamada final, revelándole que todo había sido un engaño.
El impacto emocional y la reflexión de las autoridades
El fiscal Juan no solo destacó el nivel de planificación de este caso, sino también la falta de escrúpulos de los delincuentes. "La frialdad con la que operan es impresionante. No les importa el daño emocional o físico que puedan causar a las víctimas", reflexionó. Incluso, los estafadores tuvieron la desfachatez de despedirse deseándole a la mujer que manejara con cuidado debido a la lluvia.
Un llamado a la prevención y el cuidado
Las estafas telefónicas no son nuevas, pero este caso ha generado preocupación en la comunidad por el nivel de sofisticación que alcanzaron los delincuentes. Según el fiscal, "hace mucho tiempo que no se veía algo así, donde la víctima fuera inducida a salir de su casa para realizar la entrega". Este hecho subraya la necesidad de estar atentos y alertas frente a este tipo de situaciones.
Las autoridades instan a la población a desconfiar de llamadas sospechosas, evitar brindar información personal por teléfono y, ante cualquier duda, comunicarse de inmediato con las fuerzas de seguridad.
La historia de esta mujer es un recordatorio de la importancia de fortalecer los lazos comunitarios y familiares, para prevenir que más personas caigan en estas redes de engaño que no solo buscan bienes materiales, sino que también dejan secuelas emocionales profundas en sus víctimas.
