La jueza María Eugenia Schijvarger y el juez Mauricio Federico Piombi, integrantes de la Sala A, han ratificado la sentencia del juez de audiencia piquense, Marcelo Luis Pagano, del pasado 7 de julio, al no hacer lugar al recurso de impugnación presentado por el defensor oficial Guillermo Constantino.
El imputado, de 32 años, enfrenta una condena por abuso sexual con acceso carnal, abuso sexual continuado, abuso sexual agravado por participación múltiple y promoción a la prostitución mediante violencia y amenaza, considerando su calidad de autor, todos en concurso real.
Los hechos involucran a una menor de 12 años en aquel momento, quien fue agredida sexualmente por el acusado. El agresor utilizó métodos violentos, atándole los brazos con un cinturón y tapándole la boca para silenciarla. Además, la mañana siguiente, perpetró ataques similares contra su expareja, incluyendo golpes y amenazas.
Las agresiones sexuales hacia la menor fueron reiteradas, algunas veces usando un cuchillo y amenazándola de muerte. En otras ocasiones, permitió que terceros abusaran de ella bajo coacción, incluso obligándola a mantener relaciones con un camionero a cambio de dinero.
La resolución de Schijvarger y Piombi, tras analizar el recurso defensivo y las pruebas presentadas en el juicio, respalda la perspectiva de género utilizada por Pagano al valorar las pruebas testimoniales y periciales. Destacan la veracidad del relato de la menor, descartando cualquier indicio de fabricación, y resaltan el impacto psicológico comprobado en la víctima debido a las agresiones.
En relación a los hechos contra la expareja, el Tribunal, basándose en el informe de una psicóloga forense, respaldó la veracidad de su testimonio y confirmó las secuelas tanto físicas como psicológicas sufridas, reconociendo su condición traumática.
Esta confirmación de la sentencia refleja un respaldo judicial a la perspectiva de género y a la validez de los testimonios, además de subrayar las consecuencias devastadoras que los actos delictivos tienen en las víctimas, tanto a nivel físico como emocional.