Un grave accidente de tránsito ocurrió en las primeras horas de la mañana de hoy en General Pico. Un automóvil Toyota Corola chocó violentamente contra un camión con acoplado que se encontraba estacionado en la calle 300, entre las calles 105 bis y 107. El impacto fue de tal magnitud que el automóvil quedó prácticamente destrozado, dando la impresión de haber sido "abierto con un abrelatas".
El siniestro tuvo lugar minutos antes de las 6:00 horas. El vehículo, que circulaba de sur a norte por la calle 300, por razones que aún se encuentran bajo investigación, impactó contra la parte trasera izquierda del acoplado, terminando en el carril contrario. El resultado del choque fue un automóvil sin techo y con graves daños materiales.
El conductor, un ciudadano de 28 años residente de la localidad, fue rápidamente atendido y trasladado al hospital local por el Servicio de Emergencias Médicas. En el nosocomio, se le realizó un control de alcoholemia que arrojó un preocupante resultado de 2.17 gramos por litro de alcohol en sangre, superando ampliamente el límite permitido para conducir bajo los efectos del alcohol.
A pesar de la gravedad del choque y el estado de embriaguez del conductor, el informe médico es alentador. Según el personal médico, el joven no presenta lesiones graves y se espera que sea dado de alta durante el transcurso de la mañana.
En el lugar del accidente, se llevó a cabo un intenso trabajo de las autoridades. Participaron personal policial de la comisaría tercera, la División de Siniestros Viales y la Agencia de Investigación Científica. Por precaución, también acudió una dotación de Bomberos Voluntarios.
Este incidente subraya la importancia de la responsabilidad al volante y los riesgos asociados al consumo de alcohol antes de conducir. Las autoridades continúan investigando las circunstancias exactas del accidente mientras la comunidad local reflexiona sobre la necesidad de mantener la seguridad vial como una prioridad en todo momento.