Brutal Agresión a Inspector de SENASA: Reclaman Mayor Seguridad en Barreras Sanitarias
- La Pampa
- 7 may
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En un preocupante episodio ocurrido el pasado viernes 2 de mayo en el puesto sanitario de 25 de Mayo, un inspector del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA) fue brutalmente agredido por un turista al que se le decomisó un costillar de carne. El incidente ha generado una fuerte condena por parte de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) y un reclamo urgente por mayor presencia policial en las barreras sanitarias.
El violento ataque
Según relató el delegado de ATE en SENASA, Walter Wertmüller, el inspector se encontraba realizando una inspección de rutina a un vehículo particular cuando detectó un costillar a la vista en el asiento trasero del automóvil. Tras proceder al decomiso del producto y comenzar a tirarle cal, el agresor reaccionó de manera violenta.
"El hombre se lleva la bolsa y cuando el inspector se acerca, le propina un cabezazo que le afloja dos dientes. Luego, cuando cae al piso, lo sigue golpeando con piñas y patadas", describió Wertmüller, quien destacó que otros trabajadores debieron intervenir para detener la golpiza.
El inspector agredido se encuentra en su domicilio, recuperándose de los golpes sufridos. "Está bien, pero esta situación se está tornando habitual y tememos que las agresiones se repitan", advirtió el delegado.
Reclamo por mayor seguridad
Desde ATE expresaron su repudio al ataque y solicitaron a las autoridades del SENASA la implementación de medidas ejemplificadoras contra el agresor. Asimismo, reclamaron la urgente presencia de efectivos policiales en las barreras sanitarias para garantizar la integridad física de los inspectores.
"Sin presencia policial, se detiene solo el que quiere y, en muchos casos, los conductores nos tiran los vehículos encima", denunció Wertmüller, quien consideró que la presencia de efectivos no solo aportaría mayor seguridad sino también "transparencia" al procedimiento de inspección.
Un contexto de tensión
Wertmüller también responsabilizó al gobierno por la imagen negativa que se ha construido en torno a los trabajadores del Estado. "Nos han estigmatizado como ñoquis y enemigos, pero nuestro trabajo es fundamental para resguardar la salud pública", enfatizó el delegado.
En tanto, se aguarda una respuesta oficial por parte del SENASA sobre el episodio y las medidas que se adoptarán para prevenir nuevos incidentes. La violencia contra el personal de control sanitario sigue siendo una problemática latente en distintas localidades de la provincia, generando un clima de incertidumbre y preocupación entre los trabajadores del sector.
