El diputado nacional Martín Berhongaray compartió una extensa charla en la redacción de LA ARENA, en la que aseguró que la UCR cometió un grave error “que no se puede volver a repetir”, al permitir que Macri gobernara el país de manera inconsulta, dentro del frente que integraban. “El radicalismo terminó enterándose de algunas decisiones por los medios, como el acuerdo con el FMI. Está claro que no puede volver a pasar”, aseguró.
-¿Cómo ve la situación actual del país?
- Yo veo que evidentemente el país está atravesando una crisis, y como sucede ante crisis de esta envergadura, eso genera desafíos de gobernabilidad democrática, que no se superan solamente con medidas desde la economía, sino que se necesitan respuestas desde la política, con grandes acuerdos nacionales, y sentando a la misma mesa a distintos actores que tengan injerencia y decisión, trabajando los entendimientos.
-¿Y el radicalismo cómo está?
- Yo lo veo organizándose a nivel nacional, de una manera muy interesante, buscando protagonizar un proceso, con varios dirigentes que han manifestado sus intenciones de liderarlo, siendo eventualmente candidatos a presidente. Con figuras destacadas en los principales distritos, con un importante respaldo partidario, y con el despliegue que nunca se perdió.
-¿Y en La Pampa?
- También. Con una gran expectativa a raíz de lo que sucedió el año pasado, que a muchos ha convencido de que es posible disputar la administración de la provincia, con posibilidades.
-¿Cree que el radicalismo tiene la fortaleza para encabezar las fórmulas?
- Yo creo que sí pero, más allá de eso, hay previstos mecanismos de discusión y de elección interna, con las PASO a nivel nacional, y las internas a nivel provincial. Es legítimo que el resto de las expresiones que pueden llegar a concluir en un eventual frente que integre el radicalismo también tengan sus ambiciones. El instrumento para dirimirlas es con la participación de la gente.
-¿Es posible lograr una lista de consenso radical, que permita ganar la interna de ese frente?
- Es absolutamente posible, y vamos a trabajar para que eso ocurra. Una vez que esté definido el calendario electoral, se van a acelerar todas estas negociaciones para tratar de unificar criterios. Si eso no se logra, queda esta otra alternativa que mencionaba.
Es una pena que a esta altura del año estemos hablando de un nuevo proceso electoral, y me parece también un desacierto que el año que viene estemos ante la eventualidad de cinco elecciones.
-¿Se aprendió de la experiencia de 2015, en la que Macri llegó a la presidencia en un frente con el radicalismo, pero después se cerró en su partido para la toma de decisiones?
- Ahí hubo un gran error de parte del radicalismo. Cuando fue la convención del radicalismo en la que se conformó Cambiemos, yo lo acompañé a mi padre que era convencional. Él no estaba de acuerdo, y lo hizo público.
A los dos días de la convención Macri, declaró que no iba a encabezar un gobierno de coalición, que no iba a compartir las decisiones, que él iba a decidir. Ante esta situación, el radicalismo debió rever aquello que se había resuelto, porque la decisión era compartir un gobierno de coalición, y compartir la injerencia en las grandes decisiones. Eso no ocurrió, el radicalismo hizo silencio ante la exteriorización de Mauricio Macri, y después fue lo que pasó a partir del ejercicio de la presidencia, con el radicalismo acompañando, y enterándose de algunas decisiones por los medios, como el acuerdo con el FMI. Eso no se puede repetir, está muy claro.
- Desde el radicalismo han sido muy críticos de muchas de las decisiones que tomó el macrismo. ¿Cómo hacen para ponerse de acuerdo en un programa de gobierno?
- Ese es el gran desafío de todas las coaliciones electorales, no solamente en Argentina, en el mundo. En Juntos por el Cambio tenemos diferencias. Se trata de buscar los puntos de encuentro, qué es lo que necesita la gente, para avanzar en la resolución de los problemas, que son muchos.
-¿Quién le gustaría que sea el candidato a presidente de la UCR?
- Tenemos varios candidatos lanzados, uno es el presidente del partido, Gerardo Morales, otro es Facundo Manes. Veremos, yo no creo que el radicalismo llegue a las PASO con una candidatura dividida. Entiendo que va a haber un proceso de conversación y entendimiento entre ellos, para eventualmente enfrentar a uno o dos candidatos que proponga el PRO.
-¿En La Pampa se puede lograr un entendimiento así? Da la sensación de que es complicado...
- Si, va a ser complicado, pero hay que trabajar para que eso ocurra. Cuando yo fui candidato a diputado nacional en 2019, logramos en una elección de esas características que después de 20 años no haya internas.
- El año que viene termina su mandato como diputado nacional ¿Por dónde pasan sus aspiraciones para lo que viene?
- La verdad es que no me he puesto a pensar en candidaturas. Vengo diciendo, y lo sostengo, que hasta que no haya un cronograma electoral definido, la ciudadanía necesita que los que estamos en funciones estemos enfocados en resolver las urgencias, que son muchas. Una vez que el gobernador convoque, y se aceleren los tiempos de definiciones, por supuesto que nos vamos a juntar con nuestro grupo de trabajo, sobre todo para escucharlos, y saber cuál es el grupo que piensan que hay que tomar. Por supuesto que más allá de que uno exteriorice o no una candidatura, uno viene trabajando. Tenemos una mirada sobre cuáles son las necesidades de la provincia para desarrollarse, para crecer, y llegado el momento las aportaremos como grupo y como radicales.
- Estamos ante un proceso electoral inminente, pero más allá de lo que ocurra en 2023 ¿En algún momento le gustaría ser el gobernador de La Pampa?
- Si, sin dudas, quiero ser gobernador. Forma parte de un deseo personal y de una meta colectiva. Me he preparado toda mi vida para gobernar esta provincia, he recorrido cada rincón. Y también porque tengo una idea acabada de lo que hay que hacer en la provincia para ayudarla a desarrollarse y para que crezca.
“Trabajar para que lo tengan”.
Consultado por una presunta falta liderazgo femenino dentro del radicalismo, Berhongaray aseguró: “Yo no creo que así sea, hay mujeres tremendamente valiosas que vienen marcando una presencia importante tanto a nivel provincial como a nivel local”, y añadió que “hay muchas, y siempre el radicalismo ha tenido mujeres muy importantes. Y también es importante colaborar con la proyección de cada una de estas figuras, que hacen un aporte cualitativo en lo que hace a la mirada particular y sumamente interesante que tienen”. No obstante, ante el cuestionamiento de si a la hora de la toma de decisiones, ellas tienen el mismo peso que los hombres del radicalismo, dijo que “tenemos que trabajar para que lo tengan”.
Comments